Existen diferentes tipos de prueba de detección del coronavirus. En Estados Unidos existen tres categorías de pruebas del Covid-19. Dos de ellos diagnostican si padece una enfermedad activa y la tercera indica si ha pasado el virus.
A continuación, te diremos cuáles son y cómo funcionan
Te recomendamos; Rebasa México los 670 mil casos de COVID-19
Prueba genética
La gran mayoría de los test buscan restos del material genético del virus, donde requieren una muestra nasal que debe ser tomada por un profesional de la salud y enviada a un laboratorio. Está considerada la forma más precisa de diagnosticar una infección, pero no es perfecta;
Se debe obtener una muestra lo suficientemente buena para poder detectar cualquier virus.
Procesar estas pruebas en un laboratorio suele tomar horas, por lo que los resultados podrían demorarse al menos un día, aunque un puñado de tests rápidos tardan apenas 15 minutos. Otras pruebas genéticas emplean saliva en lugar de la muestra nasal con un hisopo.
Prueba de anticuerpos
Las pruebas de anticuerpos buscarán principalmente las proteínas generadas por el cuerpo para poder combatir el virus en una muestra de sangre de un paciente. Los anticuerpos son un indicio de que una persona tuvo covid-19.
Los científicos no saben aún si los anticuerpos protegen de una reinfección ni cuánto dura esa protección. Por lo tanto, este tipo de tests son útiles sobre todo para investigadores que miden qué porcentaje dela población se ha contagiado.
Te recomendamos; Coronavirus: cuarta causa de muerte en México; ha ‘asesinado’ a casi 80 mil personas en el país
Prueba de antígenos
Con este tipo de test se buscan las proteínas que se encuentran en la superficie del coronavirus, en lugar de al virus en sí. Acaban de llegar al mercado, y los expertos esperan que ayuden a aumentar el número de pruebas que se realizan y que aceleren los resultados.
Las pruebas antígenas son menos precisas que las genéticas, pero son más económicas, rápidas y requieren equipo de laboratorio menos especializado. Sin embargo, se necesita también que un profesional sanitario tome una muestra nasal.
Un test recién aprobado de Abbott Laboratories tarda 15 minutos y puede realizarse en escuelas, oficinas y otros lugares.
